1. Para ayudar a una persona que se quiere suicidar, la primera y principal regla básica es tomar en serio su deseo de suicidarse. Existe un mito muy extendido que dice que el que se quiere suicidar realmente no lo dice. Esta idea está muy lejos de la realidad, ya que todo suicida había expresado su intención, antes de hacerlo, y sólo una de cada 10 amenazas de suicidio fueron sólo para llamar la atención. Si alguien manifiesta su intensión de suicidio y no le creemos, estamos dejando sola a una persona que está pidiendo nuestra ayuda. No la abandonemos.
  1. Otra forma de ayudar a una persona que se quiere suicidar es indagar sobre planes de suicidio. Muchos creen que alguien que se quiere suicidar lo hace de forma impulsiva en un momento de rabia o furia. La persona que se quiere suicidar normalmente tiene una idea acerca de cómo, dónde, cuándo, etc. realizar la acción. Sondear estos datos con interés y tranquilidad puede hacer que la persona se alivie y acceda a pedir ayuda.
  1. Si sospechamos que una persona se quiere suicidar hay que preguntarle clara y directa acerca de esta posibilidad. Otro mito erróneo muy frecuente es creer que si se pregunta sobre la intensión de suicidarse, se incrementa el riesgo de que lo haga o que se puede incitar a la persona para que comience a pensar la posibilidad de matarse. Una persona que no tenga intención de matarse no se verá incitada porque nosotros se lo preguntemos, y su respuesta será un NO. Pero si la persona está pensando en el suicidio como una posibilidad real, al contrario de lo que se cree, preguntar reduce el riesgo de que la persona lo lleve a cabo. Hablar sobre ello facilita la liberación, quita peso y puede ser una posibilidad grande para la prevención.
  1. Nunca se debe juzgar, moralizar o criticar a la persona que se quiere suicidar. Esto sólo hará que se cierre y deje de vernos como un agente de ayuda. Por lo tanto debemos acercarnos de forma empática, y al pregunta por esta posibilidad se hará sin predisponer; por ejemplo,“Juana, ¿has pensado alguna vez en suicidarte?”. Nunca hacerlo de forma que se entrevea prejuicio, menosprecio, temor, asombro, por ejemplo ¿No habrás pensado en suicidarte? O ¿No habrás pensado en hacer alguna tontería?
  1. Según la gravedad del caso será necesario No dejar sola a la persona y dar aviso a los familiares más cercanos para que se la vigile y acompañe en especial si vive en un piso alto. Retirar armas, medicamentos y objetos (cinturones, cuchillos, etc.), que puedan ser utilizados como medios para quitarse la vida y acudir a un servicio de urgencias psiquiátricas si fuera imperioso. De no ser un caso tan grave se puede hacer un pacto con la persona, buscando entre ambos a un profesional de la salud que pueda ayudarle en esta situación. Otra opción es proporcionarle información que se pueda obtener en el centro sanitario o de asuntos sociales más cercano o a través del Teléfono de la Esperanza 91-4590050 (atención las 24 horas).